FC Barcelona 5-0 Real Madrid

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Hay que rendirse a la evidencia del “Tiki-Taka

Hay ocasiones en que el mejor análisis de todos pasa por lo más sencillo y evidente… venció el mejor.

A decir verdad pocos, o casi ninguno, imaginábamos esta situación. Tener que escribir sobre una victoria tan contundente no estaba entre nuestros planes, pero trataremos de dar algunas pautas que para nosotros fueron claves.

El motor culé volvió anoche a carburar a un millón de revoluciones, sus medio centros Xavi – Iniesta, y en ocasiones, Messi que venía a recibir, ganaban una y otra vez a la dupla formada por Xabi Alonso – Khedira, aquellos “locos bajitos” eran más rápidos, técnicos e imaginativos que sus colegas madridistas; continuamente encontraban líneas de pase a los desmarques de ruptura sobre la zaga blanca.

Ahí estuvo el filón del equipo catalán. Monopolizaban el esférico y con una superioridad técnica brutal, únicamente tenían que mover el balón de lado a lado hasta encontrar un resquicio por el que poder golpear nuevamente el orgullo de los merengues. Así hasta un total de cinco machacantes veces, demasiado castigo para un equipo que en 12 jornadas había encajado tan solo 6 goles.

Millones de madridistas se preguntarán… ¿Y ahora qué? Consideramos acertado el modelo por el que han apostado, está naciendo un estilo de juego, están al principio del camino pero van por el lugar correcto, lo que ocurre es que la palabra «paciencia» no se contempla en un club históricamente ganador y mucho menos cuando su rival por excelencia, se encuentra en la cima de la montaña jugando con los ángeles en el paraíso.

Señores entrenadores, con toda la humildad y respeto posible les diré: acertaron en la forma, pero erraron en el fondo. Hoy es martes, sí, pero no uno más. Detrás de esta dolorosísima derrota se esconde una victoria, el triunfo de un estilo, de una filosofía que ha venido marcando la pauta del fútbol mundial durante varios años. Son los mejores y no queda más que rendirse a la evidencia.

Me encuentro en la obligación de tener que hacerles una confesión, esta noche me enamoré otra vez del “Tiki-Taka”. Tal es mi devoción que mañana tendrán un análisis sobre esta máxima del fútbol… No se lo pierdan.

Cesar L. Perez
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